Las custodias de Nuestra Señora de Gracia, nos cuentan su cometido
ADRIANA RAMÍREZ FE.- No se puede hablar de la Romería de la Virgen de Gracia, sin hacer mención a la labor que realizan la Hermandad de Señoras. Hemos querido conocerlo de primera mano, hablando con su Presidenta, Mayte Barroso.
¿Cuál es el papel que desempeña esta Hermandad?
La función principal que se nos asigna es cuida, mantener y custodiar la imagen de Nuestra Señora.
Me llama la atención que, en ocasiones, a la Virgen se le cambia de vestido, incluso de serrana ¿Por qué?
Así es, cada mes, o mes y medio la cambiamos de vestido. Dependiendo de los colores de la Liturgia Católica. Con respecto al traje de serrana, nos remontamos a 1980. Las Señoras de aquella Junta decidieron vestirla de serrana para la Novena que se celebra en vísperas de la Romería, desde tiempos inmemoriales. Para aquella Novena le confeccionaron el refajo rojo. Desde entonces se la viste de serrana durante los nueve días que dura.
¿Cuántos refajos tiene la Virgen?
En la actualidad tiene seis refajos que se le van turnando, cada año uno. De forma que, cada seis años repite. Y este año coincide con que le toca el refajo azul petróleo que le confeccionaron Los Chachipés -junto con unas enaguas maravillosas-, el 30 aniversario de su creación.
Y cuando se acaba la Novena?
El sábado anterior a la Romería se le pone el traje de gala que lleva el manto azul, que es de terciopelo y bordado en oro, y el delantero de tisú de plata. Así es como se viste para su Romería.
En cuanto a la imagen en sí ¿tiene alguna historia?
La imagen original desapareció durante la guerra civil, y cuando termina la guerra, las Señoras que quedaban de esa organización se vuelven a juntar y reorganizan la Hermandad de Señoras. Hablamos de 1941. En ese momento encargan a Mariano Benlliure la talla actual. Es una talla preciosa, pero es muy, muy delicada: el cuello es muy muy fino. Entonces, se debe tener extremo cuidado con ella siempre, pero especialmente a la hora de vestirle.
Cómo vivís las Señoras el Día de la Romería?
¡Es impresionante, todo! A mí, lo que más me gusta, el Rosario y la Misa de la Aurora. El bajarla iluminada en la oscuridad, el silencio con el rezo del rosario y, sobre todo, ver la devoción que le muestra la gente… Porque, tu vienes al Santuario a diario, y ves a gente que la viene a rezar, pero ese día es cuando todos, en ese momento, materializan ese amor que la tienen. También emociona estar en la ermita guardándola, no porque vaya a pasar nada, sino porque te emociona no sólo la cantidad de gente que pasa a verla sino cómo la van a ver; con qué devoción se la mira. Luego la Salve en el arco de la Universidad…
Como custodias que sois de ella ¡hay algún momento en que lo paséis mal?
El momento en que se la devuelve al Santuario, particularmente a mí me pone muy nerviosa y a la anterior presidente, Loli, lo mismo. Lo pasamos fatal. A ver, yo entiendo que la gente la quiera coger, pero como te he dicho, es muy muy delicada. El verla en volandas me resulta un poco estresante.