Arte y cocina se unen en la Cantina Virgilio

Una de las fachadas de la Cantina Virgilio, donde antes estaba el Madrid-Sevilla.
DIEGO LÓPEZ PEREA.- La “Cantina Virgilio” abre en San Lorenzo de El Escorial, ¿de dónde viene nuestro nombre? ¿cuál es nuestra historia?
A principios de los años sesenta Virgilio y Maribel se casan, abren su restaurante, la Cueva, entrando así en el mundo de la hostelería. Poco tiempo después, y en ese mismo edificio, nace el primero de sus hijos, Virgilio -el segundo con ese nombre-, él llevaría a toda su familia López Perea a México. En el país de los mayas nace el tercer hijo de la familia, el tercer Virgilio, español de sangre y mexicano de nacimiento.
En esta aventura llena de oportunidades y de experiencias únicas nace una idea, un proyecto en el que se unen dos conceptos: un restaurante y una galería de arte fusionando ambas culturas, la española y la mexicana.
El nombre de esta cantina es un homenaje a tres generaciones de virgilios: el primero nos introdujo en la hostelería como modo de vida, el segundo nos llevó a México y nos enseñó a disfrutarlo y el tercero es ejemplo de lo mejor de los dos mundos.
Y ahora en 2024, tres jóvenes unen sus talentos y pasiones, David la cocina, Daniel la empresa e Ichu el arte, para abrir la “Cantina Virgilio”. Un espacio donde la cocina y el arte van de la mano.
Somos fruto de un viaje de vuelta a casa.